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Lo que recibo
"El dar amor es una educación en sí misma." (Eleanor Roosevelt)
Veo la recompensa del dar amor cada día, y me sorprendo lo mucho que aprendo al aplicar esta verdad a mi vida. Demuestro mi amor dando tiempo, cariños y lo que tengo de paciencia. No es algo que muchas personas tomen como valioso pero para mí lo vale muchisimo en estos tiempos de maternidad. y cuando me doy cuenta de lo que recibo a cambio, se me llena el corazon de agradecimiento y mas amor. Es hermoso.
Les cuento, la paciencia no es algo que se me da con naturalidad, no es algo con lo que yo esté agusto pero sí es algo que deseo. Se me hace muy difícil esperar a que las cosas sucedan y dar sin ser egoísta. Me enfoco en estar y dar toda la atención que mis amados requieren (de hecho, estoy dando pecho mientras escribo). Sé que no me arrepentiré de nada porque ya estoy viendo pequeñas recompensas aquí y allá. Me levanto, pienso "Que hare hoy?", dejo a la bebé en la cuna, me doy una manita de gato, desayuno, me encargo de los deberes del hogar oro las veces que pueda y así voy con cada día tratando de ser lo mas agradecida.
En fin, con todo esto de dar amor, he conseguido lo que yo llamo "momentos de gracia", en estos últimos días porque he podido bordar sin preocuparme por el tiempo. Mientras íbamos de camino en un viaje a Mexico (unas 7 horas en carretera), he podido aprovechar y crear unos girasoles para unos aretes. Y al llegar a casa he podido bordarle unas letras a un cuadro que llevo posponiendo ya varios meses (ya me falta poquito ji ji). Lo encuentro como un lindo equilibrio y recompensa. Y pues, he aquí mi lección, doy para recibir; un circulo divino de la vida que no puedo dejar desapercibido.